La obtención a tan importante logro nos genera un alto grado de satisfacción al saber que estamos cumpliendo y contribuyendo con los objetivos y responsabilidades de la Norma, sin embargo se hace meritorio expresar que tal logro también nos obliga, orienta e incentiva a permanecer aún más comprometidos con la aplicabilidad de su normalización y de las acciones de su alcance para evitar que nuestras actividades sean utilizadas para operaciones de lavado de activos, de narcotráfico, de terrorismo y de otros actos ilicítos que atenten contra la legitimidad y transparencia del comercio internacional.